Empezamos a cruzar fronteras y a internacionalizarnos, ahora desde la Península de Santa Elena, en Libertad, cerca del Malecón. El feriado del 1ero de noviembre no pudo empezar mejor cuando mi cuñado nos llevó a almorzar a un lugar en santa elena llamado el tigre, este humilde lugar me dio buena espina de entrada, todos los asientos llenos y la gente compartiendo las mesas, como una sola familia. Mi esposa casi se infarta cuando vió este lugar por su aspecto, es que sus ideas capitalistas no tienen cabida en un lugar como este y le viene bien poner los pies sobre la tierra de vez en cuando. Ahora si, al grano: me pegué una sopa marinera "qué sopa" Fantanstica! Fresca, llena de mariscos, hirviente y generosa, estaba tan buena que me
Olvidé de tomarle la foto al plato cuando me lo dieron y me dejé llevar por su aroma y solo empecé y no paré hasta el final. Sopa marinera 5/5 (fácil)
Al día siguiente volvimos al desayudo, venían platos de bolones gigantes con bistec de carne, iban encebollados y así una serie de delicias mañaneras para empezar el día con pie derecho; yo me pegué una bandera desayuno: cazuela, ceviche mixto y arroz con pescado apanado... Puedo morir en paz. Cada cosa individualmente muy sabrosa y en conjunto una explosión de sabores que no se podría graficar ni en concierto de kiss, excelente precio: desayunos desde 2,50 y la buena noticia es que su calidad y buen gusto a dado frutos, en diciembre espera abrir en la esquina su nuevo local, mas amplio mejor acondicionado y ojalá con la misma calidad y sabor. El tigre es viaje obligado.
Pd.: mi cuñado se pegó un arroz marinero, la porción es mas grande que un chaulafan de chifa y muy generoso en mariscos de calidad, hasta langostinos por $5 que en Salinas no te alcanza ni para un ceviche